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Recordarme

6 de enero. Es el día más bonito del año. Desde que mi abuela Manuela nos trasmitió la ilusión reflejada en su cara hasta los 93 años. Cada 6 de enero le regalaba peluches que ponía en su cama. Esos, que no pudo tener cuando era niña en la España donde nació en 1910 y sucesivos. Cada 6 de enero en su recuerdo, sigo pensando en el día de Reyes como el más bonito del año. El poder del amor, El 'power of love'.

Hay canciones que tienen su día señalado para siempre. La nit de Reis tiene su espacio reservado para  Frankie Goes to Hollywood con Holly Johnson al mando y esta balada de reyes que me ha acompañado desde octavo de EGB


This time we go sublime
Lovers entwine-divine divine
Love is danger, love is pleasure
Love is pure-the only treasure
 
I'm so in love with you
Purge the soul
Make love your goal

 

 

 

4 de enero. Bridge over troubled waters, 1970. Art Garfunkel y Paul Simon. El puente sobre aguas turbulentas. Garfunkel pone la piel de gallina en esta actuación sin Simon. Una canción que lleva décadas emocionando con su letra. Sobran mis palabras. Feliz 4 de enero.

 

Cuando estés abrumado
y te sientas pequeño
Cuando haya lágrimas en tus ojos,
yo las secaré todas
Estoy a tu lado.
Cuando las circunstancias sean adversas

Y simplemente no encuentres amigos
Como un puente sobre aguas turbulentas
Yo me desplegaré

 

La música ejerce de comunicador de sensaciones. La podemos imaginar, escuchar, tararear, cantar y... bailar. Es lo que sucede con el 'My baby just cares for me'. El piano que suena te lleva hasta arriba, te eleva, te permite volar y la voz de Nina Simone cuando entona desde su 'erotic smile' hasta cuando deja el 'dont caressss' Recuerdos de swing.

 

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