El concejal de Acción Social, Eloi Cortés, ha confirmado este lunes en rueda de prensa el objetivo municipal de hacerse cargo de estos bloques de pisos situados en los barrios de Can Puiggener, Gràcia y la Creu Alta.
Se trata de una cifra de entre 40 y 50 pisos propiedad de grandes tenedores que se destinarían a ciudadanos o familias con rentas limitadas o en situación de vulnerabilidad.
El consistorio dispone de poco más de 5 millones de euros procedentes de un crédito del Instituto Catalán de Finanzas.
Ello les permitirá integrar a lo largo de este 2023 esas 40-50 viviendas en el parque público municipal.
Además, el ayuntamiento asegura que ha adquirido un centenar de pisos por tanteo y retracto y actualmente el parque de vivienda municipal supera los 1.660 pisos entre alquiler y emergencia.
Cortés ha puesto en valor la gestión realizada por el gobierno municipal desde que llegaron al ayuntamiento en 2019.
"Durante los cuatro años de mandato hemos detenido 238 ocupaciones, mientras que entre los años 2015 y 2019 tan solo se ejecutaron 63", ha señalado Cortés.
El concejal ha reafirmado que el compromiso del ayuntamiento es acabar con las ocupaciones conflictivas.
"Estamos trabajando para combatir las situaciones conflictivas y que generan problemas en nuestros barrios", y al mismo tiempo "pondremos más pisos a disposición en el parque de vivienda tanto por vivienda de protección oficial y alquiler social".
Según fuentes municipales, en Sabadell hay unas 70 ocupaciones consideradas como conflictivas y que guardan relación con extorsiones, conflictos vecinales, venta de drogas y mafias.
Además, existe más de un millar de pisos ocupados pero sin problemas vecinales.