Los dos ciclistas fallecidos, ambos vecinos de Rubí, formaban parte del grupo que fue atropellado el pasado 21 de agosto en una carretera de Castellbisbal por el conductor de un turismo que huyó del lugar y que posteriormente fue detenido por los Mossos d'Esquadra en la vecina localidad de Martorell.
El conductor, actualmente en prisión provisional y sin fianza, conducía sin carné, con exceso de velocidad y drogado.
En recuerdo de los fallecidos, miles de ciclistas han circulado por las calles de Rubí este sábado y han guardado un minuto de silencio en la plaza del Ayuntamiento, donde también estaban presentes los familiares de las víctimas.
Convocada por la Federación Catalana de Ciclismo, el Club Ciclista de Rubí -al que pertenecían- y el Ayuntamiento de esta localidad, la concentración, con el lema 'Basta ya de ciclistas muertos en las carreteras', ha servido también para reclamar una justicia más efectiva y contundente contra los conductores negligentes.
Ana María Martínez, alcaldesa de Rubí, ha definido a Miguel y José María, los ciclistas fallecidos en el atropello, como deportistas que habían encontrado en el ciclismo una actividad ilusionante en la que disfrutaban compartiendo con los compañeros de club.
"El deporte es muchas cosas buenas. Es salud física y mental, es superación, es compañerismo, es una fuente de felicidad y un perfecto transmisor de valores. Nadie debería perder la vida por practicarlo, por coger una bicicleta con un grupo de amigos. Como tampoco nadie debería abandonar el deporte que le gusta por miedo", ha dicho la alcaldesa.
Raimon Salvat, miembro del Club Ciclista Rubí, ha asegurado que la convivencia es posible cuando los conductores son personas "responsables y formadas", como por fortuna suele ser la mayoría, ha dicho, y ha reivindicado "el endurecimiento de las penas para los conductores implicados en los atropellos de ciclistas".
Por su parte, el presidente de la Federación Catalana de Ciclismo, Joaquim Viaplana, ha pedido que "se amplíen los controles policiales para echar de las carreteras a los conductores homicidas, que las leyes sean justas y proporcionadas para los ciclistas y que jueces y fiscales actúen con contundencia ante hechos como el de Castellbisbal".
El colectivo de ciclistas reivindica, en definitiva, más protección a la hora de circular -seis ciclistas han perdido la vida en carreteras interurbanas en lo que llevamos de año- y más controles de los Mossos d'Esquadra para detectar conductores ebrios o drogados.