Ernesto Valverde y sus jugadores han logrado el título de liga sin perder ni un partido. Están a sólo cuatro jornadas de acabar la liga invictos, cosa que no ha hecho ningun club desde que comenzó la liga en 1929. En la Copa del Rey tan sólo perdió un partido en la eliminatoria ante el Espanyol, para después ganar con una tremenda autoridad en la final al Sevilla.

Con estas cifras, tal y como dijo anoche Sergio Busquets, tras confirmar el título al vencer por 2-4 en Riazor al Deportivo de la Coruña, 'la temporada es de notable alto'. En la excelencia estaría ganar la Copa de Europa como señal del triplete. Ese es el objetivo anual de Barça y Real Madrid aquí. Son los dos equipos que por su presupuesto están en la necesidad de acabar la temporada con uno, dos o tres titulos grandes.

Saborear lo conseguido. Esa es la lección primera de autoestima. Lamentablemente tanto Valverde como los jugadores han tenido que oir preguntas que solo los inconformistas se hartan de repetir. ¿Si el Madrid gana la Copa de Europa, no tendrá tanto valor lo que habeis conseguido? Madrid y Barça son vasos comunicantes de esta dualildad pelotera. Está claro. Pero va siendo hora que la celebración sirva para apreciar lo conseguido. Los barcelonistas deben celebrar ahora este doblete independientemente si el Madrid mañana se clasifica ¿o no? para la final de la Copa de Europa el 26 de mayo en Kiev.