Una España muy ambiciosa saltó al Oi Stadium de la capital nipona. Sin ganas de especular, las #RedSticks llevaron rápido el partido al área rival. Así, la primera oportunidad llegó desde el penalti córner. La pizarra de Adrian Lock se pondría en marcha, para de un postrero remate de Bea Pérez, romper la igualdad inicial (1-0, Minuto 2). Una oportunidad que se repetiría poco después pero ahora sin la misma fortuna. Belén Iglesias, con un golpeo que se marchaba a centímetros del palo derecho de la portería china, pudo ampliar la renta.

Una circunstancia que si llegaría con la entrada en el segundo parcial, cuando una internada por el flanco derecho de Carlota Petchame, lo culminaba Berta Bonastre con un nuevo tanto en el casillero español (2-0, Minuto 18). Un duelo que se tomó una tregua, en el que España dominaba la bola para evitar posibles acercamientos peligrosos sobre su portería.

Tras el intercambio de campos las pupilas de Yang quisieron tomar las riendas de un partido, donde el conjunto español, con su buena posición sobre el azul nipón, evitaba el peligro sobre la meta defendida por María Ángeles Ruíz Castillo. Dos penaltis córner a favor de España; con un de ellos estrellado en el palo, un remate de Laura Barrios y otro penalti a favor de las asiáticas, pudieron cambiar el signo de un partido que no cambiaba sus guarismos al cerrar este tercer cuarto.

En los quince minutos definitivos, las hispanas controlaron el encuentro buscando pases fáciles que impidieran pérdidas y por tanto, posibles acciones peligrosas sobre su portería. Una bola clara de Belén Iglesias pudo terminar por sentenciar, pero no hizo falta para confirmar el segundo triunfo del combinado nacional.

España jugará su último encuentro de la fase de grupos el sábado (3 horas) frente a la anfitriona; Japón