Es el caso del último modelo que pudimos probar. Se trata del Arona 1’5 ECO TSI de 150 CV FR. El salto de calidad en cuanto a potencia con 150 CV que hacen de este SUV-B uno de los más potentes en su segmento.

Su motor de gasolina (TSI) según las estadísticas de Seat tiene un consumo mixto de 5 litros y una aceleración de 0 a 100 en 8’3 segundos. Hablamos de un coche con cambio manual de seis velocidades. Teniendo en cuenta que es un coche principalmente urbano – para otras rutas de montaña están sus hermanos – y con una conducción estable y deportiva con buen agarre en las curvas entre las cosas que nos satisfacen viendo su potencia.

Nos gustó la conducción deportiva y su estabilidad. Al ser el modelo más potente de gasolina lo encontramos en dos equipamientos. El que probamos fue el FR que cuenta con llantas de 17 pulgadas, climatizador bizona, sistema multimedia con pantalla táctil de 8 pulgadas, conectividad con smartphone, cámara de visión trasera, control de crucero, sensores de luz y lluvia, sistema de aparcamiento semiautónomo y sensores de aparcamiento traseros y delanteros.  La gama completa es por tres motores de gasolina (de 95, 116 CV y 150 CV) y dos Diesel y uno que puede funcionar con gasolina y gas natural comprimido (GNC) de 90 CV.

En cuanto a las cifras, tiene 4’183 de largo por 1’780 y 1’552 de ancho y alto. Su maletero está en los 400 litros, buen número respecto a sus competidores y 45 litros por encima del Ibiza. Con los asientos de atrás abatibles se alcanza hasta los 1.280 litros. Una muestra para compararlo entre las medidas de la nueva generación Seat. Su depósito de gasolina está en los 40 litros.

Probamos el modelo de carrocería naranja – igual que en una prueba anterior de un Arona 1.0. Acabados de lujo: pomo de la palanca de cambios en aluminio y cuero, consola central en negro piano, puertas en negro piano, tablero en cuero sintético y empuñadura del freno de mano en cuero. Arona, potencia que convence